El sentimiento de dolor y el sentido de desesperanza, al igual de no saber qué ocurrirá después de un golpe tan fuerte como el de perder a un ser amado; la profunda tristeza y desconsuelo que se experimenta, suelen ser los sentimientos y uno de los momentos más difíciles por la que una persona puede pasar, ya que ha sido gran parte de su vida.
¿Puede ser posible pasar por un duelo sin que alguien muera?
Hoy quiero que podamos compartir tu a través de la lectura y yo a través de este escrito que hay duelos que se pueden experimentar sin que haya una muerte física.
Quiero hablarte desde mi experiencia desde el escenario propio DE VIDA.
La pérdida de una persona es algo doloroso lo que lo lleva a pasar por un proceso de Duelo, por el hecho que a conciencia la persona doliente se da cuenta que ya no vera más a ese ser y es lo que genera su profundo dolor sin embargo también quiero enfatizar que también se da cuando existe una ruptura en un vínculo de relación amorosa, aquella persona con la que decidiste formar un hogar y soñar con un vida juntos, en este caso la unión matrimonial.
Hace 5 años exactamente pase por ese proceso(divorcio) y ahora me identifico con muchas mujeres que han pasado por este mismo proceso en sus vidas, conozco ese juicio de sentirte avergonzada, señalada, burlada, siendo el punto quizás de muchas conversaciones que te hacen sentir aún más dolida, y pasar por un sufrimiento del cual crees que no te vas a recuperar, una tristeza que día a día se levanta y se duerme a tu lado, el tener el anhelo de creer que todo cuanto viviste e hiciste por tu matrimonio no valió nada, y sobre todo una impotencia por no poder cambiar las cosas.
Suele pasar que ante un rompimiento, divorcio, abandono, infidelidad dentro de una relación genera ciertas afectaciones y alteraciones a nivel emocional y psicológico, más cuando ha sido una relación de años. Hay ciertas manifestaciones en nuestra conducta y emociones tales como: sentir de soledad, ansiedad, depresión, aislamiento, confusión y una falta de motivación hacia llevar nuestra vida como normalmente solíamos hacerlo. Estos son sentimientos y conductas razonables y entendibles debido al impacto de la ruptura del matrimonio. Sin embargo el sentir ese dolor no es explicable y es por eso que se puede comparar a la perdida física de un ser amado y eso también es un DUELO; un duelo sin muerto.
Cuando hay un proceso de separación, de divorcio hay un rompimiento, una ruptura que trae un impacto emocional y también empieza una fase de luto por el vínculo roto.
En el matrimonio no solo existe una legalidad social u escrita, sino también espiritual. En la biblia al Dios crear al hombre también le hizo “ayuda idónea” en este caso esposa, y le declaró que serían una sola carne (Génesis 2:24) entonces desde un principio conocemos que la mujer tenía una conexión física y espiritual con su esposo.
Cuando los conyugues se unen en intimidad, existe una ligadura de alma, es un sello de la unión y cuando hay una ruptura por el motivo que sea hay un proceso de un profundo dolor por ambas partes (almas) se están desarraigando y es cuando el alma comienza a dolerse y entra a un proceso de luto, porque hay una ruptura, no solo es firmar un divorcio, separase, es ver que tu alma ha sufrido una herida, porque perdiste algo que era parte de tu ser y eso es semejante a perder a un ser querido que sabes que no vas a volver a ver, el divorcio viene también a ser parte de despedirse, desligarse y soltar al igual que un ser amado que ha muerto.
Tú mujer que has pasado por un Divorcio y has estado luchando por largo tiempo con sentimientos de culpa, soledad, tristeza o profunda melancolía, vergüenza, sensación de desesperanza y no hallas sentido a tu vida o simplemente no encuentras como sanar tu corazón y empezar de nuevo porque no crees que puedes salir adelante, ese dolor, ese proceso de mucha lucha interna depende mucho de ti misma, y de también del espacio que puedas dar a Dios en tu vida para que él pueda sanar. Es tu alma la que se siente dolida por la pérdida de tu esposo, de tu matrimonio.
Hoy yo puedo decirte que se puede salir de esa tristeza, de ese dolor; esas noches de incansables momentos de llanto, de ese amanecer que esperas porque la noche te parece larga y dolorosa, esos momentos llegarán a su fin.
Una de las primeras cosas que yo hoy puede decirte es que Dios está de tu lado, que por lo tanto no estás sola aun así no lo creas, también de que no te sientas más culpable pues lo que paso pasó y ya está en un pasado que no podemos cambiar, pero sí que tenemos un vida en la que si podemos aprender a vivir de la mejor manera.
Que hay tiempos que Dios acomoda las cosas, y otros momentos en el debes darte cuenta de lo mucho que vales. Que los años que te diste ya no serán recompensados por esa persona, pero que puedes hoy tu puedes ver lo valiosa que eres, que te empieces amar y comiences a soltar, que aprendas a canalizar el dolor y entregar toda soledad, angustia y ese dolor tan profundo que sientes sin poder explicar.
Puedo decirte que hay un ser maravilloso que restauró, sano y limpio mi alma y mi mente, que fue un proceso duro, pero que no estuve sola, el ESPIRUTO SANTO estuvo para ayudarme a sanar. No te sientas inútil, tampoco que nada valdrá la pena.
Hoy levanta tu mirada, arréglate, hace cosas que antes no creías poder y sobre todo da y entrega a Dios ese corazón que solo él puede cambiar. Que los cambios y las restauraciones en Dios si son posibles. Suelta ese pasado doloroso y amate.
A diario yo me repetía esta frase, te la comparto; que sea parte de tu amanecer y acostar:
“HOY ES MEJOR QUE AYER, MAÑANA SERÁ MEJOR QUE HOY”
Dios está en control y te ama como el mejor y fiel esposo.
Jissel Nohemí Hernández Campos 36 años de edad, Licenciada en Psicología Clínica. Está a cargo del ministerio de niños en COMUNIDAD CRISTIANA CREO, donde trabaja gran parte de su tiempo con mucho esmero y dedicación. También brinda atención psicológica y espiritual a mujeres dentro y fuera de la iglesia, que es una de las cosas que más ama hacer.
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