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Mateo 11:28-30 TLA

28»Ustedes viven siempre angustiados y preocupados. Vengan a mí, y yo los haré descansar. 29 Obedezcan mis mandamientos y aprendan de mí, pues yo soy paciente y humilde de verdad. Conmigo podrán descansar. 30Lo que yo les impongo no es difícil de cumplir, ni es pesada la carga que les hago llevar.»

He repetido la frase: “estoy cansada”, muy frecuente estos últimos días. Si me preguntas, ¿que hago en mi día? Te respondería primero con las cosas que no suelo hacer. No camino bajo el sol, no corro un maratón, no cargo cosas pesadas, no subo escaleras varias veces, no tomo un bus de aquí para allá. ¿Entonces de que estás cansada dirás? Me cansan la cantidad de correos, llamadas, Whatsapp, notificaciones de Messenger, Facebook e Instagram, con mensajes como “¡quiero o necesito esto para ya!”, eso “me urge”. Empiezo a correr y a correr con los diseños o lo que necesiten, para cumplir con una cantidad de requerimientos que nunca tienen un fin, cuando creo que terminé ya viene otro en camino. No hay espacios para relajarse, dormir, comer en paz, pasear y no pensar en trabajo.

Entré en unos días donde ya no iba al gimnasio o leía menos la biblia en la mañanas, porque quería dormir más, para dejar de decir esa frase: “estoy cansada”, sin embargo dormir más horas no calmaba mi cansancio. Empecé a sentirme irritada por nada, y ciertas actividades que me gustaban perdieron el sabor. Me gusta cumplirle a las personas, no soporto no ser confiable para ellas, me gusta ayudar a las personas en mi área: diseño, decoración, música, manualidades, espiritualidad…pero me cuesta decir no.

He luchado con ese problema por mucho tiempo, decir no, me cuesta mucho, porque creo que no debo negarle a nadie mi ayuda o servicio, pero esto me lleva al agotamiento.

Cuando estamos cansados, nuestro brillo se pierde, los ánimos están apagados y la mente empieza a pensar tonterías. Fastidio por los clientes, enojo con los hijos o pareja, quejas con el clima o la situación del país, antipatía con actividades, eventos, gastos, tareas de rutina, etc.

Dios siempre quiere vernos con gozo, pero al parecer lo perdemos en nuestros quehaceres interminables. Decir no, es poner límites y es saludable.

Conmigo Podrán Descansar (Dijo Jesús)

He descubierto con Jesús lo que te permitirá no caer en el cansancio.

Vengan a mi

Es increíble como la mente se anticipa a eventos que no ocurrirán y ya está temeroso por ello. Como percepciones erradas de lo que alguien dijo sobre nosotros nos mina los pensamientos. Y como el temor de no poder pagar ciertas cosas nos abruma.

Si tan solo le dices al Señor inmediatamente lo que te preocupa, El traerá paz sobre tus pensamientos y los ordenará de manera eficaz. Créeme que muchos pensamientos se ordenarán, ideas de cómo resolver se te vendrán a la mente o bien otros pensamientos errados que no tuvieron que llegar se esfumarán de tu mente.

Cuando le has confesado a un amigo tus penas, tristezas o preocupaciones ¿si o no que te sientes mejor?, a eso le llamamos desahogo, pues bien, ese amigo no necesariamente te resuelve pero solo el hecho de exteriorizarlo te hace ligera la carga, ¿cierto? Eso mismo ocurre con Dios, tus cargas pierden su peso y lo realmente hermoso es que El te da respuestas que te favorecen.

Obedezcan Mis Mandamientos

El ser humano tiene sed por decidir para imponer lo que le parece bien, porque ese poder le genera ego, y eso nos hace sentir engrandecidos, aunque cuando se maneja bien ese poder de decisión te hace sentir valioso y libre.

Eso de obedecer no nos gusta, porque requiere sacrificio y rendición,

pero el secreto del descanso está en obedecer, y te evitarás la cantidad inimaginable de problemas que podrían venir a tocar a tu puerta para dejarte devastado.

Aprende de El que es paciente y humilde

Es muy triste que las cualidades como la paciencia y la humildad se vean muy poco en las personas hoy en día. Aunque tenemos un modelo de persona que siempre tuvo la compostura correcta y una dependencia correcta en Dios Padre, sin importar si era el hijo de Dios, buscaba con toda determinación hablar con EL y ser guiado. Tenia la angustia de lo que iba a acontecer, el peso de obedecer en todo, y lo logró siempre gracias a que su paz venia de arriba. Tu paciencia y humildad se incrementará si dependes de el, y tu cansancio, por favor, simplemente se irá.

Su Carga es Ligera

Agradar a Jesús no es difícil, a veces creemos que servirle es un ir y venir de actividades que te agotan y no deben parar, pero Él siempre dijo que escogiéramos lo mejor, y eso está en pasar tiempo con Él, es la mejor parte, ser su amigo y escucharle con atención. Si lo escuchas invertirás tu tiempo en lo que vale la pena, y en lo que produce mucho fruto.

Aparta un día en la semana donde no hagas nada de tus afanes rutinarios, y realmente te relajes y repongas fuerzas, y dedica tiempo para buscarle, El también lo dijo en su Palabra, pera además de apartar ese día, el descanso está en una persona, y ese es Jesús.